Mirco Keilberth: 100 Insassen in einer Zelle, Spiegel Online, July, 23, 2018:
Tunesien versichert, der angebliche Ex-Leibwächter von Osama Bin Laden werde fair behandelt. Mehrere Nichtregierungsorganisationen berichten aber von Folter und Misshandlungen in dortigen Gefängnissen
Ricard Gonzalez: La venganza contra el expresidente Morsi, una auténtica tortura, El Pais, July, 23, 2018:
Afectado por diabetes crónica y reumatismo, el régimen egipcio niega el tratamiento médico adecuado al político encarcelado
Mirco Keilberth: Die Blamage, Der Spiegel, July, 20, 2018:
In einer fragwürdigen Hauruck-Aktion wurde ein angeblicher Gefährte Bin Ladens abgeschoben. SPIEGEL-Recherchen zeigen: Schlamperei war es nicht, sondern Absicht. Der Rechtsstaat ist beschädigt.
Sarah Mersch: Keeping the speculators out of Tunis, Qantara, July, 18, 2018:
While there is a gradual reawakening of interest among the inhabitants of the Tunisian capital in their historical old town, the cityʹs colonial districts are at risk of falling prey to property speculators. Sarah Mersch on the development of Tunis.
Ricard Gonzalez: El cisma entre el presidente y su primer ministro agrava la crisis política en Túnez, El Pais, July, 18, 2018:
El presidente Beji Caïd Essebsi retiró su apoyo al ‘premier’ y le instó a presentar su dimisión o una cuestión de confianza ante el Parlamento
Javier Martin Rodríguez: Argelia, la bomba de relojería de la migración irregular en el Mediterráneo, EFE, July, 16, 2018:
Sentadas entre raídos cartones en medio de la acera, Selima y su hija, de apenas cuatro años, no son más que otro obstáculo para la riada de personas que suben por una de las calles que conducen a la colonial plaza de la Grand Post, corazón de Argel.
Javier Martin Rodríguez: Italia recupera un pacto entre Gadafi y Berlusconi para frenar la migración, EFE, July, 15, 2018:
Negociado en secreto en 2008, cuando Muamar al Gadafi maniobraba para reintegrarse en la comunidad internacional, el “tratado de amistad” rubricado por el dictador libio y el entonces primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, supuso un cambio de paradigma en el Mediterráneo.